
02 May Combatiendo estereotipos
Por más hombres en trabajo flexible
Proporcionar arreglos de trabajo flexibles es un buen intento de lograr un equilibrio entre el trabajo y la vida, pero debemos observar quién acepta esta flexibilidad y garantizar que haya igualdad de género en los arreglos de trabajo flexibles.
Tenemos que asegurarnos de que no sea solamente una opción para las mujeres.
Si bien es cierto que las mujeres somos más propensas a aprovechar las opciones de trabajo flexible, dada la carga de trabajo no remunerado y las horas dedicadas al cuidado de personas dependientes, es importante alentar a los hombres a hacer lo mismo, para no estigmatizar esta opción.
Aprovechar la licencia de paternidad y las opciones de trabajo remoto son un par de formas de crear un lugar de trabajo más inclusivo. Cuantos más hombres elijan estas opciones, más cerca estaremos de lograr un equilibrio entre el trabajo y la vida.
Recordamos que ofrecer arreglos de trabajo flexibles no es suficiente, ya que si solamente las mujeres lo hacemos, se pueden crear diferentes categorías de trabajadores, impidiendo por ejemplo que las mujeres seamos promovidas a puestos de responsabilidad y toma de decisiones.
Debemos trabajar activamente para identificar y eliminar las barreras sistémicas que impiden que las mujeres avancen en sus carreras.
En los últimos años, la investigación ha demostrado que ha aumentado la participación de los hombres en acuerdos de trabajo flexible.
Según un informe del Foro Económico Mundial, en 2020, el 48 % de los hombres encuestados en 27 países dijeron que considerarían reducir su salario a cambio de arreglos laborales más flexibles, en comparación con el 41 % en 2018. Esto indica una tendencia positiva hacia una mayor igualdad.
Sin embargo, aún queda trabajo por hacer. Un estudio realizado por Harvard Business Review descubrió que los hombres que aprovechaban los arreglos de trabajo flexibles tenían más probabilidades de ser percibidos como “menos dedicados” o “menos ambiciosos” que sus colegas masculinos que trabajaban a tiempo completo. Esta percepción puede afectar negativamente sus oportunidades de avance profesional.
Para superar esta percepción, es importante cambiar la cultura del lugar de trabajo. Las empresas deben crear una cultura que valore el equilibrio entre la vida laboral y personal de todo el personal, independientemente de su género. Las empresas tienen que estar capacitadas para reconocer y abordar los sesgos inconscientes y garantizar que todas las personas sean evaluadas en función de su desempeño y contribuciones, en lugar de su presencia en la oficina.
Además, las empresas pueden implementar políticas que alienten a los hombres a aprovechar los arreglos de trabajo flexibles. Por ejemplo, pueden ofrecer incentivos para los hombres que toman licencia de paternidad o crear grupos de recursos para empleados que apoyen a los hombres que eligen opciones de trabajo flexibles.
Garantizar igualdad de oportunidades es importante para lograr la igualdad de género en el lugar de trabajo, y se necesita nuestra participación activa.
Proporcionar arreglos de trabajo flexibles es un paso importante para lograr un equilibrio entre el trabajo y la vida personal, pero es igualmente importante garantizar que hombres y mujeres tengan las mismas oportunidades para aprovechar estas opciones. Las empresas deben trabajar para crear una cultura que valore el equilibrio entre la vida laboral y personal de todo el personal y eliminar las barreras sistémicas que impiden que las mujeres avancen en sus carreras. Al trabajar hacia una cultura laboral más inclusiva, podemos crear una sociedad más justa y equitativa para todas las personas.